El programa capacita a funcionarios y personas privadas de libertad en el manejo de la tierra y la semilla, a fin de que obtengan beneficios a futuro, remarcó su impulsora, Lorena Ponce de León, tras inaugurar un invernadero en el Centro. Ver más información:
El programa Sembrando de Presidencia de la República inauguró, este miércoles 1.°, un invernadero en la huerta de la unidad n.º 4 (ex Comcar), en Santiago Vázquez, perteneciente al Instituto Nacional de Rehabilitación (INR). Además de Ponce de León y González, asistieron el director del INR, Luis Mendoza, y el comisionado parlamentario penitenciario, Juan Miguel Petit.
En el lugar, ubicado en el centro de preegreso de personas privadas de libertad de la unidad, trabajan 17 internos, en la plantación de tomate, melón, pepino y zapallito de tronco.
El director de Convivencia y Seguridad Ciudadana, Santiago González, precisó que se trabaja para que los internos desarrollen un oficio que les permita trabajar al egresar. Además valoró el esfuerzo que realizan Sembrando, los funcionarios policiales y los operadores penitenciarios para cambiar la realidad de los más de 13.000 internos de los centros de reclusión del país.
Destacó que el objetivo y el compromiso gubernamental son que la gente desarrolle un oficio para trabajar y, de esa manera, disminuir el tiempo ocioso en las celdas.
Por su parte, Lorena Ponce de León indicó que el programa Sembrando Nuestra Huerta trabaja en seis departamentos por un lapso de seis meses, junto con organizaciones públicas y privadas en la creación de invernáculos, que se construyen con el apoyo de personas privadas de libertad.
Detalló que el proyecto comenzó en 2020, con la finalidad de trasladar conocimientos en torno a la siembra, el cuidado del plantín, el crecimiento, la floración, la fructificación y el consumo de la cosecha.
Puntualizó que se basa en tres pilares: la huerta comunitaria, que, junto con la Oficina de Planeamiento y Presupuesto, se desarrolla en 125 municipios del país; la creación de invernáculos en las escuelas, de manera que los alumnos lleven plantines a sus hogares, y el desarrollo de este tipo de proyectos en los centros penitenciarios.
“Queremos aportar capacitación a funcionarios y privados de libertad para que aprendan el respeto a la tierra, a trabajar la semilla y que aprovechen el aprendizaje para que el día de mañana tengan beneficios propios”, remarcó la impulsora del programa.
Experiencias similares a la de la fecha se desarrollan en las unidades n.º 26, de Tacuarembó; n.º 16, de Paysandú, y n.º 15, de Cerro Largo. Se prevé la inauguración de una huerta en la unidad n.º 22, de Rocha, el 9 de setiembre, y, a futuro, otra en dependencias del Instituto Nacional de Inclusión Social Adolescente (Inisa) de Canelones.