El gobierno nacional anunció los nuevos precios a partir del día 1 del mes entrante. La fijación de precios se hará a partir de ahora cada dos meses.
La ministra de Industria Fernanda Cardona y el ministro de Economía Gabriel Oddone anunciaron en conferencia de prensa los costos de los combustibles a partir de junio.
- Nafta Premium: $ 80,87 el litro.
- Nafta Súper: $ 78,47el litro.
- Gasoil 50S: $ 47,03 el litro.
- Gasoil 10S: $ 54,03 el litro.
- Queroseno: $ 52,40 el litro.
- Supergás: $ 88,46 el kilo.
Además, Cardona y Oddone anunciaron que la fijación de precios se hará cada dos meses, y no ya mes a mes:
Cardona citó el artículo 235 de la ley número 19.889, conocida como Ley de Urgente Consideración (LUC) que establece que Poder Ejecutivo actualizará con una periodicidad máxima de sesenta días los precios de venta al público de los combustibles. En ese sentido, dijo que a partir de julio los valores se anunciarán según los bimestres de calendario.
Agregó que se continuará tomando como referencia el promedio del precio de paridad de importación (PPI) para la fijación del precio de los combustibles que es publicado por la Unidad de Regulación de los Servicios de Energía y Agua todos los meses.
Asimismo, Cardona anunció que el actual gobierno retoma la implementación del factor de estabilización sobre el PPI, que el gobierno anterior había dejado de reportar en 2021. El objetivo es presentar “reglas claras para que se sepa cómo se compone la fijación de precios”, sostuvo. Ese monto será de 1,5 pesos por lo que resta del año, y será revisado de forma anual.
“Esto no es para hacer caja, para hacer dinero, sino para que la canasta de energéticos se equilibre” y poder mantener, por ejemplo, el subsidio al supergás, fundamentó.
Oddone, por su parte, complementó afirmando que el Poder Ejecutivo introduce una regla predefinida con límites que permite “suavizar” los efectos de la volatilidad del mercado energético.
Según esta metodología, la tarifa se ajustará siguiendo la referencia (PPI más factor de estabilización), pero con un límite máximo de ajuste del 7%, a los efectos de mitigar la repercusión de la volatilidad internacional sobre el mercado local y sobre el precio que se le cobra al público.