El ministro de Defensa, Javier García, dijo que «se compró en forma directa y con valor absolutamente desproporcionado. Uruguay es un país austero. Los gustos de los gobernantes no deben hacerse con dineros públicos».
La primera convocatoria -realizada el pasado 15 de julio con una base de 350 mil dólares- no recibió ninguna oferta.
El avión, un Hawker 700 fabricado en 1979, fue comprado por el Estado uruguayo en 2016, durante la presidencia de Tabaré Vázquez, a un costo aproximado de un millón de dólares.
Fue adquirido -primero mediante una compra directa que fue observada por el Tribunal de Cuentas y luego a través de una licitación pública internacional- al empresario Carlos Bustin, en ese momento propietario de Autolider, la representante e importadora en Uruguay de Mercedes Benz.
El gobierno de Vázquez lo presentó como un avión «multipropósito» ya que, además de trasladar al mandatario, iba a utilizarse para vuelos sanitarios.
La compra generó discusiones en el sistema político, ya que la oposición sostenía que era “innecesaria”.
También se objetó el precio pagado, que se consideró demasiado caro.
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