«Fue un año negro. Lo fue para el mundo y obviamente Uruguay no ha sido una excepción», dijo el ministro de Trabajo y Seguridad Social, Pablo Mieres.
Pablo Mieres no oculta que 2020 ha sido un “año negro”. El coronavirus golpeó fuerte al mercado de trabajo, no solo en Uruguay sino en el mundo. Dice que espera que se pueda salir rápido de la pandemia para ir hacia tres objetivos fundamentales para su gestión: crear una política de capacitación de empleo, regular a los 400.000 que hoy desempeñan tareas por fuera del sistema y luchar contra el desempleo en los más jóvenes, que hoy es de un 34%.
En cualquier caso, el aumento de la desocupación va a rondar en dos o tres puntos por encima de lo que era la situación antes de la pandemia. Comparado con muchos países del mundo el balance sería menos malo, pero obviamente es una situación negativa. Esto tiene el agravante de que nuestro punto de partida fue muy complicado. En febrero había 10,5% de desocupación y a eso le cayó encima una tormenta perfecta.
La estrategia hasta ahora ha sido crear una red de contención, la que ha estado centrada en los seguros de paro. Pero no hay que olvidarse que esto es un salvavidas y que el trabajador pierde poder adquisitivo, cobra la mitad del sueldo en un seguro total y en uno parcial las tres cuartas partes. O sea, hay que tomar medidas. Para adelante tenemos tres grandes asuntos. Uno es crear una política de capacitación para el empleo, en la que el actor central será el Inefop, y por la cual se buscará dar respuesta a un montón de personas que quedaron o quedarán por el camino porque sus habilidades o competencias ya no son demandadas. Lo otro es ir hacia la formalización; en enero la informalidad era de 25% y se espera que estos números crezcan por la pandemia. El que es informal lo es porque no tiene suficientes ingresos o porque prefiere arriesgar su cobertura en salud, por ejemplo, a aportar. Y en tercer punto está trabajar para bajar las cifras de desempleo juvenil, que son escandalosas, y que llegan al 34%.
Sobre la cantidad de personas en seguro de desempleo:
A fines de noviembre 76.000, es decir la cifra más baja desde que estalló la pandemia, y por lejos. En marzo, cuando empezó todo, terminamos con 120.000. En abril y mayo hubo 190.000. En octubre eran 85.000. Pero vamos a ver diciembre, porque hay dos efectos contradictorios, por un lado el comienzo de la actividad de temporada, las fiestas y etc., y por otro el incremento de casos que quizá haya tenido algún eco en esto.
Sobre el trabajo informal:
«En la encuesta del INE no aparece. Teníamos 25% de informales, 400.000 trabajadores, en enero. Los últimos datos no dan un aumento. Pero tampoco dan un aumento de la desocupación, es mínimo. La desocupación era 10,5% en febrero y en setiembre fue de 11,2%. Lo que creemos es que hay una desocupación encubierta, que no aparece todavía, que se puede ver con la reducción de la población ocupada. Lo que pasa es que hay gente que quiere ser ocupado pero no sale a buscar trabajo y entonces no aparece en el índice».
Sobre declaraciones de la oposición, Frente Amplio:
«-Yo creo que hay que reconocer lo que se ha hecho bien. Por ejemplo, el Plan Ceibal fue muy útil para la educación en tiempos de pandemia. Las asignaciones familiares son de las décadas del 40 y 50. El Uruguay tiene una historia de un estado de bienestar temprano, de la época del primer batllismo, que se fue consolidando con decisiones unas tras otras, y obviamente el FA agregó cosas. Por eso me da mucha pena cuando viendo al FA la imagen que me viene a la mente es la de un cumpleaños infantil: un niño con los ojos vendados tirando palazos para pegarle a la piñata, pero siempre le erra. Me duele ver al FA buscándole el pelo al huevo, o lo que pasó con la norma contra el desarrollo forestal, que siendo el partido que más desarrolló la forestación vaya y vote algo que en sus gobiernos no quisieron votar. Todo para generarle un daño a la coalición. Después se niegan a la reglamentación del artículo 38 para limitar el derecho a reunión, cuando impulsaron la cuarentena obligatoria que solo era viable estableciendo medidas de seguridad».
Ésta es una parte de la entrevista que El País a quien hoy está a cargo de la cartera de trabajo en nuestro país y en representación del Gobierno Nacional.