La inflación ha llegado a sus números más bajos desde el comienzo de la pandemia, con una inflación en marzo de un 0,62% y una acumulación anual de 8,34%, números que igualan la situación de Uruguay en febrero de 2020, antes de la pandemia del coronavirus. En marzo del año pasado la inflación había sido del 1,33%, y la interanual se ubicaba en 9,16%.
Estos números reafirman la tendencia a la baja inflacionaria que viene ocurriendo desde el principio de la pandemia. El objetivo del gobierno es ubicar la inflación entre un 3 y 7%, y se proyecta un cierre de año con 7,1%. Hasta marzo la variación anual fue de un 3,07%, un punto por debajo de marzo de 2020 (4,09%).
Las principales divisiones que influyen en la variación son la carne, que aumentó un 1,56%, las legumbres y hortalizas en general (1,26%), los alimentos y bebidas no alcohólicas (0,15%), los muebles y artículos para el hogar (0,07%), el transporte (0,10%), la recreación y cultura (0,10%). Por otro lado, las frutas bajaron un 7,73%.
La suba en el transporte se explica por el aumento de precios en los autos, las motos, y los pasajes de avión. En cuanto a los muebles, subió el precio de los colchones, las heladeras y los lavarropas. Recreación y cultura tuvo incidencia por el aumento de precio en computadoras y membresías en gimnasios.