Categorías
Coronavirus Nacionales Salud

Radi: “La situación actual no está fuera de control”, pero el momento de vacunar “es ahora”

El coordinador del GACH aseguró que la demora en la vacunación “no es catastrófica” Mientras el gobierno nacional termina de negociar las vacunas que llegarán al país, el Grupo Asesor Científico Honorario (GACH) avanza en los informes y recomendaciones sobre la pandemia.

El miércoles se reunieron todos los miembros para una puesta a punto donde reafirmaron su “independencia técnica y académica” y la idea de evitar “a toda costa ser una plataforma de debate político partido”, aseguró en diálogo con Informativo Sarandí el coordinador del GACH, Rafael Radi. En la reunión, además de ponerse al día los 55 miembros del GACH, se definió la creación de un grupo “transversal” que incluya a los subgrupos de Datos y Salud para elaborar un informe del estado de situación a enero de este año para poder hacerle recomendaciones directas al Poder Ejecutivo. Radi se refirió a la situación actual del país, donde la cantidad de casos diarios parece haberse estabilizado. De todas formas, Radi afirmó que “estamos en un momento en que sacar conclusiones definitivas no es fácil porque estamos en un período del año que tiene fluctuaciones diferentes: venimos de las fiestas de Navidad y fin de año, la movilidad de las vacaciones y ahora el regreso, no sabemos exactamente qué nos están expresando los números”. El coordinador sostuvo que “faltan más datos de los próximos días” para saber si “llegamos a una etapa de meseta de esta ola o si es una estabilización transitoria que eventualmente pegará otra subida en el corto plazo”. Radi destacó que a comienzos de diciembre la duplicación de los casos en Montevideo demoraba 14 días y ahora demora en promedio 37, una cifra que baja a 34 días a nivel país, pero que baja aún más, a 29 días, en el interior. Esto indica que “la epidemia en el interior está propagándose y en Montevideo y la zona metropolitana tiende a haber una estabilización”, aunque hay que tener en cuenta la migración desde Montevideo al interior y evaluar qué pasa luego del retorno de las vacaciones. En relación con el índice de positividad de los nuevos casos, Radi dijo que “es muy difícil esperar que en el medio de una ola el porcentaje de positividad se mantenga en los niveles de confort que tuvimos en su momento, que eran menores de 1% y luego menores de 4%”. Actualmente el promedio es de 11% de positividad, lo que indica transmisión comunitaria y presiona fuertemente al sistema de rastreo y seguimiento, que no está logrando llegar a todos los contactos, “más allá de que nuestro propio sistema de diagnóstico molecular tiene un limite de 10.000 test por día”, aclaró el coordinador del GACH.

El sistema de rastreo del Ministerio de Salud Pública trabaja bien con un máximo de 200 casos nuevos por día, algo de lo que Uruguay está muy lejos. El objetivo que tiene que alcanzar el país, según Radi, es llegar a esa cantidad de casos “para volver a la estrategia de testeo, rastreo y aislamiento”. Para Radi, “en Uruguay ha habido una adhesión” a las recomendaciones y eso provocó que el R, que es el número de reproducción de la enfermedad, se ubique en “casi 1”. “Hay algo de lo que estamos haciendo que está bien; no está todo mal, no es que nadie se cuida ni nada nos cuida”, opinó. El científico considera que es necesario seguir trabajando en políticas de comunicación que se suman a las medidas tomadas por el gobierno, como la disminución de los aforos, el cuidado en el transporte interdepartamental y el cierre de fronteras: “Eso ha colaborado seguramente a que los números bajen”, puntualizó. Con respecto a tomar medidas más restrictivas para disminuir la movilidad, dijo que se pueden implementar, pero “son todas decisiones complicadas que tienen impacto a varios niveles”. “Hay costos que hay que pesar pensando en aquellas poblaciones con menor capacidad de adaptación a situaciones restrictivas, pero sin dudas que la disminución de la movilidad es con cambios de comportamiento o disposiciones que vienen del Estado, y es algo que tienen que resolver las autoridades políticas”, destacó. De todas formas, aseguró que “la situación actual no está fuera de control, porque el sistema sanitario no está descontrolado; sí tenemos casos en el CTI, sí hay números de fallecidos por día que son significativos, con un promedio de ocho personas por día, y hay un horizonte de bajar los casos por un conjunto de razones”.

La demora en las vacunas “no es catastrófica” Radi fue enfático al decir que el coronavirus seguirá presente por varios años: “No nos lo vamos a sacar de arriba en 2021, van a seguir apareciendo olas en los próximos años; incluso si hay vacunación, va a volver en algún momento”. De todas formas, aclaró que la vacunación “va a ir generando un control progresivo de esa situación comunitaria. Va a transformarlo de algo descontrolado a algo con brotes esporádicos”.

Categorías
Coronavirus Nacionales Política

Carámbula dijo que reunión con Lacalle fue «muy fructífera y franca»

«Nos vamos con una expectativa cierta de que lo antes posible pueden estar las vacunas», dijo el frenteamplista.

El presidente de la República, Luis Lacalle Pou, recibió en la tarde de este jueves en la Torre Ejecutiva a Marcos Cárambula, ex presidente de ASSE, dos veces Intendente de Canelones y legislador.

El frenteamplista fue uno de los opositores que llevó la voz cantante al mencionar la necesidad de que el gobierno estuviera abierto a recibir colaboración de otros países de la región para conseguir las vacunas.

Carámbula dijo en conferencia que la reunión fue «muy fructífera, muy positiva, muy franca. Nos vamos con una expectativa cierta de que lo antes posible pueden estar las vacunas, que hoy en el mundo están siendo administradas. Lo conversado nos permite aguardar con expectativa los próximos días».

Destacó, además, que se fue de la Torre Ejecutiva «con la certeza de que el presidente y su equipo están trabajando en estas negociaciones, que tienen un aspecto confidencial que debemos respetar».

Foto de portada: Gastón Britos / FocoUy

Categorías
Coronavirus Nacionales Salud

Gobierno avanza en acuerdos con Pfizer y Sinovac por vacunas contra el coronavirus

El objetivo es empezar a vacunar en marzo y seguir con un ritmo de 150.000 dosis por semana:

El gobierno uruguayo avanza en las negociaciones bilaterales con laboratorios para obtener sus dosis de las vacunas contra el coronavirus. Según informó este jueves Búsqueda la delantera la llevan la empresa alemana Pfizer y la china Sinovac, con las que ya se estaría redactando el acuerdo.

Tal como se señala en en el Plan de Vacunación que divulgó el Ministerio de Salud Pública (MSP), la idea es comenzar con el personal médico en marzo y luego seguir en diferentes etapas con el resto de la población. La idea de llegar a las 150.000 dosis por semana también se mantiene como objetivo.

Vamos a estar ampliando esta noticia, que compartieron los colegas de La Diaria en el día de hoy.

Categorías
Coronavirus Mundo

Cuba inmunizará a toda su población contra el coronavirus con una vacuna desarrollada en el país

La campaña comenzará durante el primer semestre de 2021.

Autoridades de la salud de Cuba, anunciaron que durante el primer semestre del año que viene se podrá inmunizar a toda la población del país con una vacuna desarrollada en el Instituto Finlay de Vacunas (IFV) de La Habana.

El país estará capacitado “para inmunizar a la población cubana contra el virus SARS-CoV-2 en el primer semestre de 2021”, aseguró el director del IFV, Vicente Vérez Bencomo, en declaraciones recogidas por el diario oficial Granma consignadas por la agencia de noticias AFP.

Vérez Bencomo hizo esta afirmación ante el presidente el país caribeño Miguel Díaz Canel.

Foto de portada: Yander Zamora, EFE

Categorías
Coronavirus Nacionales Salud

Un uruguayo fue vacunado contra el Coronavirus y comparte su experiencia.

El DJ uruguayo Fabián Jara contó cómo es la experiencia de la vacuna de Pfizer en Argentina y cuál es su evolución tras darse dos aplicaciones.

Desde que contó que es uno de los voluntarios que están recibiendo la vacuna contra la COVID-19, al DJ uruguayo Fabián Jara le dicen muchas cosas en Buenos Aires. A veces son buenas, como felicitarlo por la valentía que tuvo al ofrecerse. En otras le advierten que le van a insertar un microchip o lo que indique la teoría de turno. Una vez, el dueño de una heladería lo increpó y le dijo que tenía que estar loco para dejarse meter «cualquier cosa» con la «mentira» de la vacuna.

Todo el mundo quedó dado vuelta por el nuevo coronavirus, que originó una crisis sanitaria y económica cuyas verdaderas consecuencias comenzarán a verse más claramente en los próximos meses. A Jara, que vive en Argentina desde los ochenta, la pandemia le pegó especialmente duro. Como DJ, periodista radial y gestor cultural, rubros en las que la presencialidad y las aglomeraciones son parte del trabajo cotidiano, sus actividades se redujeron a cero.

Deprimido por los días oscuros de la cuarentena obligatoria en Argentina (que lo llevó a no ver amigos personalmente desde marzo hasta setiembre), en agosto vio una oportunidad de sentirse útil y activo: una convocatoria buscando voluntarios para probar la vacuna de Pfizer y BionTech en Argentina.

Fabián se postuló tras llenar un formulario online y en agosto recibió una llamada telefónica. En primer lugar lo descartaron por tener una enfermedad preexistente (diabetes), pero en los primeros días de setiembre volvieron a contactarse con él para decirle que habían ampliado los grupos, aceptándolo como voluntario.

El 15 de setiembre Jara se presentó en el Hospital Militar de Buenos Aires para darse su primera dosis, una pequeña odisea que le llevó siete horas. Además del control de temperatura y la entrega de una credencial para identificarlo, los especialistas le brindaron una charla explicativa de casi tres horas para detallarle punto por punto la experiencia que estaba aceptando y el destino que tendrían sus muestras de sangre, entre otros procedimientos.

La explicación incluyó el recuento de la enfermedad, desde que fue detectada en Wuhan, a los intentos por encontrar una vacuna y la decisión de elegir Argentina para reclutar voluntarios. «Lo más fuerte es cuando te hablan sobre las responsabilidades si te pasa algo. Yo lo sabía al postularme, pero te aclaran que los laboratorios no son responsables en ese caso, y es fuerte escucharlo», cuenta Fabián a Montevideo Portal.

Luego de pasar por la extracción de sangre -donde también debió responder un cuestionario que incluía un «protocolo» de conducta para voluntarios- y otros encuentros con médicos y expertos, le hicieron un hisopado en una experiencia casi «espacial»: las personas que la realizaron estaban en una cabina de la que solo salían sus brazos, «como si fueran astronautas», para manipular el hisopo.

Tras la espera para ver el resultado del hisopado, llegó el momento de darse la primera dosis. «Es una aplicación como cualquier otra vacuna», explica Fabián, aunque recuerda haberse sorprendido del largo de la aguja. Tras recibir la vacuna, quedó media hora en observación en el lugar, para comprobar que no hubiera reacciones inmediatas.

El procedimiento incluyó también la descarga de una aplicación de seguimiento para COVID-19. Es decir, no para monitorear posibles efectos secundarios de la vacuna sino para corroborar que no haya contagio de la enfermedad. Todos los miércoles a las 18 horas la aplicación lanza una alerta en el teléfono de Fabián y le pide que rellene algunos datos, un seguimiento que durará dos años.

Además de la intervención de la aplicación, tiene también un seguimiento personal: una funcionaria del estudio lo llama por teléfono los miércoles de noche y le pregunta cómo va su evolución tras haber recibido la dosis. Así será también por dos años (lo que implica un total de 26 meses de controles).

El 21 de octubre Fabián volvió a presentarse en el hospital para recibir su segunda dosis, una experiencia que se redujo en esa ocasión a cuatro horas. Esta vez la charla fue más breve pero pasó nuevamente por las fases de extracción de sangre, hisopado y, por supuesto, la vacunación.

Su tercera presentación en el Hospital Militar fue el 11 de noviembre, pero simplemente para control y no para darse otra dosis. Tendrá un control por mes en forma presencial y uno semanal en forma remota.

Hasta entonces, Jara no sabía si le habían administrado la verdadera vacuna o un placebo (en lo que se conoce como experimento a doble ciego, en el que ni los individuos ni los investigadores saben quién pertenece al grupo de control y quién al grupo experimental). Sin embargo, en los últimos días los responsables del trabajo comunicaron a quienes habían recibido solo placebo que serían vacunados. Fabián no estuvo entre ellos, lo que lo llevó a concluir que ese encuentra entre quienes recibieron las dosis auténticas.

Causas y efectos

Tras recibir ambas dosis, a Jara comenzó a dolerse el brazo unas dos horas después de la aplicación, lo que lo limitó físicamente por un rato pero sin mayores consecuencias.

Al sábado siguiente de haberse aplicado la primera dosis, sin embargo, despertó con un ataque de tos persistente que duró algunos minutos. Preocupado, cometió un error: cuando la aplicación de su teléfono le preguntó por síntomas, detalló este episodio sin percatarse de que allí solo debía responder por síntomas de COVID y no por la vacuna. Eso activó un protocolo por la enfermedad que motivó que estuvieran a punto de enviarle asistencia médica a su casa.

Más allá de este malentendido, la vacuna de Pfizer no le ocasionó ningún síntoma perceptible desde que se dio la primera dosis. Según comprobó en charlas posteriores, el acceso de tos no fue atribuido a la aplicación debido a lo limitado que fue en el tiempo.

«Estoy perfecto de salud. Los días anteriores a la vacunación fueron muy oscuros para mí, especialmente por la falta de perspectiva laboral y lo estricto de la cuarentena acá. El hecho de haberme embarcado en esto también me hizo bien anímicamente. Me dio algo interesante para hacer y me hizo sentir más útil para la sociedad», cuenta Fabián.

Que se esté dando la vacuna no significa que pueda cambiar de vida o descuidarse. «Estar vacunado implica que tengo protección para mí. Pero por ahora las medidas de seguridad siguen igual: entrar con barbijo a los negocios, mantener distancia, etcétera», señala.

Pese a la desconfianza que le muestran algunos, está convencido de que hizo bien en presentarse como voluntario. «Todavía lo comento contento y siempre hay al menos uno que me dice algo. Pero yo no puedo ver como negativo que la gente se postule para hacer esto, porque si no seguiríamos en un callejón sin salida», aclara.

Desde fines de los ochenta que Jara facilita la llegada de bandas uruguayas a Argentina (estuvo, por ejemplo, detrás de los primeros recitales de Buenos Muchachos en la otra orilla) y llegó incluso a inspirar al director Adrián Biniez para el personaje central de Gigante (película uruguayo-argentina que ganó el Oso de Plata en Berlín). El mundo que conoce y en el que trabaja, el de la cultura, está entre los principales campos arrasados por el nuevo coronavirus.

Pfizer no va a comenzar con las primeras vacunaciones hasta fines de diciembre y la «vieja normalidad» deberá esperar unos cuantos meses más, si es que posible tal cosa. Jara es solo uno de los miles de voluntarios que participan en varios ensayos en Argentina, esperando que se acelere el regreso a una vida más parecida a la que conoció.

Montevideo Portal