Nueva Zelanda ha confirmado este martes la existencia de dos casos de coronavirus en el país, ambos importados, registrados ocho días después de dar por recuperado el último caso activo.
Así lo ha comunicado el director general de Salud de Nueva Zelanda, Ashley Bloomfield, que ha especificado que se trata de dos mujeres de la misma familia procedentes de Reino Unido que han viajado a Wellington a visitar a un pariente, que ha fallecido finalmente.
Bloomfield, que ha precisado que se les hizo la prueba diagnóstica del coronavirus este lunes, ha explicado que ambas mujeres se encontraban en aislamiento en Wellington. En concreto, volaron de Reino Unido a Brisbane, con escala en Doha, llegaron a Auckland y de ahí a Wellington. Hicieron el viaje el 13 de junio en un vehículo privado.
En Wellington sólo han tenido contacto con el miembro de su familia y, según Bloomfield, las mujeres en cuestión han tenido cuidado para no poner a nadie en riesgo. «En este caso, las mujeres han hecho todo lo que se les ha pedido», ha dicho en una rueda de prensa, recogida por el diario ‘New Zealand Herald’.
Según destaca la primera ministra Jacinda Ardern, «ahora se están haciendo pruebas a aquellos que estaban en las instalaciones de cuarentena al mismo tiempo, y a aquellos que pudieron haber tenido alguna, incluso la más remota, posibilidad de contacto».
Desde el ministerio de sanidad también se ha afirmado que se investigará cómo se produjo la cuarentena de las mujeres ya que «las exenciones compasivas deberían ser raras y rigurosas, y parece que en este caso no se incluyeron los controles que esperábamos que ocurrieran. Eso no es aceptable».
El 8 de junio, Nueva Zelanda anunció que no había casos activos registrados de la Covid-19 en el país, después de que la última paciente, una mujer de Auckland, no mostrara síntomas de la enfermedad en 48 horas. Hacía 17 días desde que se había informado del último caso en Nueva Zelanda, donde se han confirmado 1.506 positivos y 22 muertes.