El Centro Nacional de Ciberseguridad (NCSC, por sus siglas en inglés) dijo que los objetivos de los piratas eran organismos de investigación y desarrollo de vacunas del Reino Unido, Estados Unidos y Canadá y que sus acusaciones tienen el respaldo de las autoridades estadounidenses y canadienses.
«El NCSC evalúa que (el grupo) APT29, también llamado Dukes (Duques) o Cozy Bear (Oso agradable) con casi toda seguridad opera como parte de los servicios de inteligencia rusos» señaló antes de agregar que Estados Unidos y Canadá opinan lo mismo.
El canciller británico, Dominic Raab, manifestó su indignación por este hallazgo, que fue dado a conocer junto con consejos para que las propias organizaciones se puedan proteger ellas mismas de los ciberataques.
«Es totalmente inaceptable que los Servicios de Inteligencia rusos tengan en el punto de mira aquellos que están trabajando para combatir la pandemia de coronavirus», dijo.
«Mientras otros persiguen sus propios intereses con un comportamiento irresponsable, el Reino Unido y sus aliados están trabajando duro para encontrar una vacuna que proteja la salud de todos. El Reino Unido seguirá contrarrestando a aquellos que realizan estos ciberataques, y trabajando con los aliados para que los responsables rindan cuentas», agregó.