Peña dijo que hubo “episodios” que han hecho perder la confianza sobre la calidad del agua potable.
El nuevo ministro marcó prioridades para su gestión.
Adrián Peña mencionó la reglamentación de la ley de gestión de residuos, las buenas prácticas de suelos, promover políticas de Estado en materia de ambiente, y en particular, el agua: Queremos trabajar en los cursos, queremos trabajar en las cuencas, queremos trabajar en la fuente, y mejorar la calidad del agua. El agua hoy es potable, pero ha habido eventos y episodios que han hecho que la confianza haya bajado en ese sentido. Vamos a trabajar para mejorar esa confianza.
El nuevo ministro asumió en el museo del agua, en Aguas Corrientes; lo acompañaron el presidente de la República, ministros, y autoridades del Partido Colorado.
La nueva cartera contiene la dirección nacional de ambiente, la dirección nacional de aguas, la oficina de cambio climático, y tendrá en su órbita las obras sanitarias del estado y el instituto nacional de meteorología: El gran rol del ministerio, desde mi punto de vista, es ser ese gran articulador y administrador de políticas; uno advierte que hay una gran cantidad de políticas en materia de ambiente, de esfuerzos, a veces un poco dispersos, y hay que darle unidad y dirección.
El Ministerio de Ambiente fue creado en la ley de urgente consideración, recientemente aprobada; tendrá un presupuesto anual de entre setecientos cincuenta y ochocientos millones de pesos, informó el ahora ministro.
El exdiputado Gerardo Amarilla, del Partido Nacional, asumió como subsecretario. Aún no está definido quién será el director de secretaria.