En una entrevista que le hicieron al lìder del sindicato màs importante que tiene nuestro paìs, agregò que «La familia Lacalle quedará en la historia del Uruguay porque son personas de alto nivel polìtico.
El presidente del Pit agregó que en lo que va de este gobierno, habló con él por teléfono en tres ocasiones, una de ellas en la negociación de la pauta salarial.Fernando Pereira habló con mejordicho.uy portal de periodismo de estudiantes de la Universidad Católica.
El presidente del Pit CNT dijo que tiene una relación diaria con el gobierno, que habla con el ministro de Trabajo Pablo Mieres muy seguido, y que ha hablado con el presidente por teléfono en contadas ocasiones.Pereira: A los presidentes se los llama solo cuando se cree que se agotaron todas las medidas a nivel de los Ministerios. ¿Cuántas veces fue imprescindible en estos meses? Tres veces. ¿En qué momentos? En la negociación de la pauta salarial –cuando considerábamos que la defensa del trabajo era imprescindible–. Las otras dos por ahora me las voy a reservar.
Fernando Pereira sostuvo que Uruguay tomó una posición audaz al asumir una “libertad responsable” frente a la pandemia del coronavirus, pero en cuanto a lo económico y social, no ha tomado las medidas sociales compensatorias que debería.
En la entrevista el presidente del Pit resaltó a la familia Lacalle, al presidente y su actitud política:Es una familia potente desde el punto de vista político y capaz. Los Lacalle tienen más historia que los Herrera en política. Sin dudas es una familia que va a quedar en la historia del Uruguay. No solo porque ha tenido dos presidentes, sino porque son personas de alto nivel político.
Sus movimientos tácticos y presenciales en estos seis meses han sido de alta capacidad. Después se puede discutir el contenido, pero eligieron una forma de comunicarse con la sociedad que les ha resultado.
Una parte es la conferencia, pero otra parte es que baja y habla con la gente. Se presenta en un lugar donde hay problemas. Eso construye un sentimiento de cercanía. No estamos ante un político improvisado y este es el error de Uruguay: pensar que porque alguien tiene 47 años es un político con poca experiencia.
