El presidente aseguró que Uruguay está lejos de tener fuera de control la enfermedad y que la capacidad de atención fue reforzada en los últimos meses. A la población más joven le solicitó que evite la organización o participación en fiestas y eventos y aseguró que la fiscalización de estas actividades será reforzada en coordinación con el Congreso de Intendentes.
Agregó que los hilos epidemiológicos no se perdieron y recordó que al inicio de la pandemia trabajaban 24 rastreadores de casos, y ahora hay 84. En caso de que la situación se complique, será instalado un call center para el apoyo a esta tarea.
Junto con Lacalle Pou, en la conferencia de prensa estuvieron el secretario de Presidencia, Álvaro Delgado; el director de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto, Isaac Alfie, y el ministro de Salud Pública, Daniel Salinas.
Las palabras del mandatario fueron pronunciadas tras el encuentro de dos horas con las autoridades, en el que también participaron la vicepresidenta de la República, Beatriz Argimón, ministros, jerarcas de la salud e integrantes del Grupo Asesor Científico Honorario (GACH).
En la reunión, se consignó la situación del coronavirus en la región y el mundo, que presenta rebrotes de la enfermedad y situaciones agravadas en Argentina y Brasil, en algunos casos con registros inéditos, datos que fundamentan la suspensión por dos semanas de las clases en la ciudad de Rivera y, por segunda vez, el incremento de los controles en la frontera para “contener el ingreso y egreso de la ciudad de Rivera hacia el resto del país”, expresó el mandatario.
Sobre los controles en la frontera, recordó que la declaración jurada hace referencia a los artículos 224 y 239 del Código Penal. “Esa facultad que nosotros tenemos vamos a utilizarla, porque se está, posiblemente, ante la violación de la declaración jurada de personas que tienen que hacer cuarentena y no la hacen, van a ser llevados ante la Justicia”, dijo el presidente.
Detalló que Uruguay reservó 700.000 dosis de vacunas, pero que en la actualidad la mejor inoculación que existe es el tapaboca, el alcohol en gel y el distanciamiento social. La información precisa que los contagios en el mundo bajaron en personas mayores de 50 años y crecieron en las menores de esa edad. Ante esta afirmación, llamó a la responsabilidad de los jóvenes y solicitó que eviten la circulación, las reuniones y las fiestas.
Las intervenciones del Ministerio del Interior en fiestas se incrementaron y algunos uruguayos fueron llevados a la Justicia, refirió el mandatario. “Esas medidas se van a extremar por parte del Ministerio del Interior en conjunto con el Congreso de Intendentes”, adelantó Lacalle Pou, quien se reunirá este viernes 22 a las 14:30 horas con el Congreso de Intendentes para compartir información.
“Si el Uruguay está casi en la plenitud de sus libertades en reuniones, economía, en el ámbito laboral y cultural, es porque ha habido una libertad responsable. Cedemos, se complica, y ahora hay un empujón mundial y regional. Estamos entre el número cinco y el tres del podio mundial de contagios. Y, por eso, tenemos que cuidarnos más”, indicó.
En referencia a la temporada de verano, anunció que mañana habrá una reunión al respecto, a la que se agregará el Ministerio de Economía y Finanzas. “Será un verano restringido. Las fronteras van a estar básicamente cerradas, salvo excepciones que ya se conocen y quizá, alguna más”, expresó.
El presidente mencionó que es una decisión difícil para el Gobierno y que se realiza basada en lo que ha pasado en el mundo, cuando se abrieron fronteras, y en el “relajamiento del turismo”; en naciones como Islandia, en que había pocos casos, estos se dispararon, y así se repite en muchos países.
Respecto a las pérdidas económicas que trae consigo la pandemia mundial y la incidencia en nuestro país, Lacalle Pou dijo que la pérdida de ingresos va a ser importante y añadió que se va a forzar lo fiscal, dentro de lo posible y de manera responsable, finalizó.