La diputada y candidata a intendente Nibia Reisch (P. Colorado), remitió una carta a la ministra de Economía y Finanzas, Ec. Azucena Arbeleche, dando a conocer la situación de desigualdad en el cobro del Impuesto de Primaria que perdura en el departamento de Colonia.
En la misiva, Reisch recuerda que el tributo “gravaba originalmente a las propiedades inmuebles urbanas y suburbanas, y desde el 2015, también a los inmuebles rurales, con valores superiores este año a los $ 190.878”.
“Los recursos obtenidos por este impuesto deben financiar principalmente la alimentación escolar a más de 270.000 niños en escuelas de contexto crítico, transporte escolar, mantenimiento de escuelas, material didáctico, seguridad y limpieza, salidas didácticas y campamentos, inversiones en equipamiento a escuelas de tenor crítico y otros”, indica el texto.
En tal sentido, Reisch expresa que “estamos de acuerdo con el destino que se le da a los recursos, pero en el departamento de Colonia hay planteada una situación injusta, que entiendo debe ser revisada por la señora ministra”, cual es un incremento imprevisto de los valores del tributo desde hace muchos años.
“El inesperado aumento del valor del impuesto en Colonia, se debió exclusivamente al nuevo aforo que se realizó en el año 2001, durante la administración del ex intendente Carlos Moreira, con un crédito facilitado a ese efecto por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Ese reaforo afectó a unos 16.000 inmuebles de las ciudades de Carmelo, Colonia del Sacramento, Nueva Helvecia y Tarariras, y determinó para ellos un brutal incremento en los valores de aforo preexistentes, ya que dejó de tomarse como base de cálculo el valor histórico, tomándose el (nuevo) valor BID. El reaforo se fijó y a partir de allí el valor del Impuesto de Primaria tuvo para los sujetos pasivos obligados reajustes desmedidos, que oscilaron desde un 300% a un 2.000%”, subraya Reisch.
De esta forma, “en el departamento, las propiedades quedaron con dos aforos diferentes: el “menor aforo”, fijado por la Dirección de Catastro propia de cada Intendencia, y el “mayor aforo”, fijado por la Dirección Nacional de Catastro. En aquel entonces, en su interés recaudador y con la voracidad fiscal que los caracterizaba, el presidente de la República, Tabaré Vázquez, y el titular del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), Danilo Astori, aplicaron a rajatabla los mayores aforos”, manifiesta la legisladora colorada en su carta.
“Cuando se estableció ese impuesto era una reducida contribución, pero ahora ha pasado a ser un impuesto muy importante, en algunos casos del mismo orden que la Contribución Inmobiliaria, y en muchos casos increíblemente superior a ésta. Ello perjudicó a los ciudadanos de esas cuatro ciudades y generó una situación de injusticia tributaria, ya que pagan con un criterio diverso al del resto del departamento”, prosigue la diputada coloniense.
“La Intendencia de Colonia tampoco se preocupó nunca por componer los reajustes que sufrieron los inmuebles en estas localidades, que generan una situación de desigualdad e injusticia tributaria, y simplemente eludió la situación en virtud de una mejora de su recaudación”, añade la parlamentaria.
“Nuestra preocupación, entonces, es reiterar y apoyar lo que desde tiempo atrás vienen reclamando los propietarios de inmuebles urbanos y suburbanos de las cuatro ciudades mencionadas. Y esto porque entendemos que estamos frente a una situación inconsistente y arbitraria, contraria a la normativa legal, que lleva ya casi dos décadas”, expresa.
“Demás está puntualizar que los colonienses no pretenden incumplir con las obligaciones tributarias y en especial con este impuesto, que busca un fin muy loable y meritorio, cual es atender la situación de los escolares en todo el país. Sin embargo, es imperioso, y justo, corregir esta desigualdad, para lo cual nos ponemos gratamente a las órdenes de la señora ministra a fin de colaborar en lo que sea menester”, finaliza la carta de Reisch a Arbeleche.