El excandidato a presidencia por el Frente Amplio envió una carta dirigida a Gonzalo Civila donde expresó su voluntad de renunciar al partido.
Daniel Martínez y su alejamiento de un sector histórico frenteamplista.
“Estoy convencido de que por encima de mi alejamiento orgánico seguiremos luchando por la justicia social y el desarrollo nacional independiente”
«No soy dueño de la verdad, ni creo en los que así se sienten, pero hoy pienso que, en este momento histórico, el Partido, además de diferencias que hemos tenido, no es mi lugar para aportar en el camino de sumar al proyecto popular». «La lucha por los valores y postulados del FA, nos seguirá encontrando en el camino», dijo el exintendente de Montevideo.
Por otra parte, aclara: «Nunca dejaré de ser socialista, ni de buscar ser coherente con los postulados y sueños que nuestro partido ha sostenido históricamente».
“Estoy convencido de que por encima de mi alejamiento orgánico seguiremos luchando por la justicia social y el desarrollo nacional independiente”, manifestó.
A continuación, la carta de renuncia:
«Cro. Secretario General del Partido Socialista
Gonzalo Civila
Por la presente me comunico con usted cro, para presentar mi renuncia a mi condición de miembro del Partido. Nunca dejaré de ser socialista, ni de buscar ser coherente con los postulados y sueños que nuestro partido ha sostenido históricamente.
A nuestro PS no tengo más que agradecimiento, ya que en él conviví con compañeras y compañeros maravillosos, de los que aprendí lo que era ser socialista en lo político, pero también en la conducta de vida, José Pedro Cardozo, Polo Gargano, Guillermo Chifflet, Ernesto de los Campos, Yuyo Melgarejo, José Díaz, Pedro Montañez, Daisy Tourné, Aldo Guerini, Lalo Fernández, Mónica Xavier, y también me permitió conocer, compartir y sembrar amistad con eros como Pepe D’Elia, Jorgelina Marinez, entre tantos otros 49 años de afiliado en los que aprendí lo que es el debate de ideas y, por parte de muchas y muchos compañeros, vivir la fraternidad, saber que no hay dueños de la verdad, y que la humildad es la mejor consejera, pues enseña a aprender de los errores.
En este Partido aprendí que parte de su esencia ideológica ha sido el entender, que lo esencial de los tiempos que vivimos es unir al más amplio espectro de pueblo en torno a un proyecto nacional, de desarrollo con justicia. No se trata de ir más o menos rápido, por que lo único que permite avanzar, y hacer los cambios más permanentes, es la capacidad de unir pueblo entorno al proyecto Nación que levantamos, lo que es sinónimo de fortalecer al FA.
No soy dueño de la verdad, ni creo en los que así se sienten pero hoy pienso que, en este momento histórico, el Partido, además de diferencias que hemos tenido, no es mi lugar para aportar en el camino de sumar al proyecto popular.
Sin pretender dictarle cátedra a nadie, desarrollemos nuestra actividad lejos del odio. El odio es la herramienta de la derecha, y que además, lo ha profesionalizado en los últimos años. Concentrémonos en sembrar fraternidad entre los frenteamplistas y entre todos les uruguayos.
Estoy convencido de que por encima de mi alejamiento orgánico, seguiremos luchando por la justicia social y el desarrollo nacional independiente. La lucha por los valores y postulados del FA, nos seguirá encontrando en el camino.
Con respeto y fraternalmente.
Daniel Martínez».